Habrás oido hablar del dióxido de cloro, pero ¿Qué es el dióxido de Cloro?. Existen fórmulas químicas que han contribuido enormemente a mejorar la calidad de vida de los seres humanos.
El dióxido de cloro es una de esas fórmulas, pues nos permite consumir agua potable sin bacterias, además de que elimina el color, por lo que también podemos encontrarlo en sectores como la fabricación de hojas en blanco.
Si te interesa conocer qué es el dióxido de cloro, cuál es el consumo permitido por la ley y cuales son los elementos químicos que lo componen, estás en el artículo adecuado.
El dióxido de cloro es un gas sintético que no se encuentra naturalmente en el ambiente. Su color se encuentra entre el amarillo y el verde, y presenta un olor irritante. Este gas es un agente oxidante que es muy utilizado para potabilizar el agua y como blanqueador.
Por lo anterior, el dióxido de cloro tiene varios usos que impactan directamente en la vida cotidiana de las personas, como: convertir el agua en potable, desinfectar objetos de uso diario, además de que es muy utilizado en plantas que fabrican papel, pues es un potente blanqueador.
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¿Cómo se origina la mezcla?
Este gas es originado a partir de la oxidación del clorito de sodio con cloro (2 NaClO2 + Cl2 → 2 ClO2 + 2 NaCl). Además es importante saber que es especialmente soluble en agua fría, ya que es 10 veces más soluble que el cloro elemental.
Dióxido de Cloro y medio ambiente
Anteriormente mencionamos que esta sustancia tiene otra propiedad: ser soluble. Así que al igual que lo ocurrido con el aire, el dióxido de cloro presenta una serie de cambios al momento de ser vertido dentro de un líquido, ya que se convierte en el ion clorito, que es un compuesto de oxidación con un una alta cifra de reactividad, cuyas propiedades son altamente funcionales para poner fin a microorganismos y bacterias alojadas con frecuencia en fluidos.
Un claro y sencillo ejemplo de su función en la erradicación de materiales dañinos, es al momento de emplearse para purificar y crear agua potable completamente inofensiva para el cuerpo humano, totalmente apta para el consumo.
Cantidad de dióxido de cloro que se puede consumir
La EPA ha estipulado que la cantidad máxima de dióxido de cloro permitida en el agua potable sea de 0.8 miligramos por cada litro de agua, ya que se considera la cantidad idónea para eliminar los microorganismos sin afectar la salud del consumidor.
En 1814 se inventó el dióxido de cloro a partir de la mezcla de ácido sulfúrico y clorato de potasio, lo que ha llevado a que desde esta fecha sea utilizado en varios sectores industriales para purificar el agua y para blanquear.
Hay que recordar que el dióxido de cloro tiene un uso meramente industrial, mismo que es avalado por distintas organizaciones, empresas e instituciones a nivel mundial, ya que científicamente no se ha comprobado que la ingesta constante y en grandes cantidades de este gas ayude de alguna manera a mejorar la salud de las personas. Al contrario, se sabe que el dióxido de cloro puede resultar tóxico para los seres vivos.
